BAÑO

BAÑO RELAJANTE

EL SECRETO ESTÁ EN LOS PEQUEÑOS DETALLES

Los sucesos del día a día, tanto negativos como positivos, ya sean problemas en el trabajo, enfermedades, cuidados de los hijos, estudiar o hacer exámenes, pueden causar estrés y nos pueden hacer sentir agotados y sin energía. Para eliminar esas tensiones e irnos a dormir relajados no hay nada mejor que un buen baño; eso sí, para quienes tienen bañera, pero no te preocupes, porque también sirve para los que tenemos ducha.

En SísinVello queremos darte unos sencillos consejos para que disfrutes de un baño placentero al final del día. Además, el baño puede convertirse en un buen aliado para tu piel. Aquí te explicamos paso a paso cómo conseguirlo.

  1. Tómate tu tiempo. Si quieres aprovechar al máximo esta experiencia, ten en cuenta que has de reservarte tiempo para ti mismo. Hay que convertir la hora del baño en un momento de relajación. Nadie puede relajarse si cierra los ojos y piensa en cuánto tiempo ha pasado o que se le hace tarde para una cita. Asegúrate de que nadie te molestará. Si hay alguien más en casa, hazle saber que te tomarás un tiempo para estar tranquilo. Comprueba que tu teléfono está apagado y fuera de tu vista.
  2. Previamente al baño es importante que recopiles todo lo que necesitas para ese momento de relajación. Prepara tus herramientas: toallas frescas, todos tus productos de belleza y productos para la ducha, para evitar salir de ella.  Puedes incluir una deliciosa bebida hidratante, pero siempre en una taza de material seguro, para evitar accidentes.
  3. La ambientación es muy importante. Lo recomendable es usar luces tenues y suaves. Si no tienes la posibilidad de regular la iluminación, puedes utilizar velas con aromas placenteros.
  4. La música chill out es otro elemento esencial que te ayudará a relajarte. Úsala con un volumen suave. Si no tienes este tipo de música, en YouTube encontraras mucha música ambiental.
  5. El agua es la parte más importante de un baño. Si tienes una bañera, entonces llénala de agua. La temperatura dependerá de la que tu cuerpo esté dispuesto a tolerar; pero recuerda, no es recomendable por encima de los 36-38 ℃.
  6. Algunas gotas de aceites aromáticos, como lavanda, jazmín o rosa, entre muchos otros, darán un toque especial. La lavanda es un clásico para estos baños por su efecto relajante. En cualquier tienda de artículos de baño podrás encontrar aceites de todo tipo.
  7. También es recomendable si además de aceites aromáticos le añades un pequeño puñado de sales de baño. Esto ayuda a reducir la tensión, purificar la piel, y ayudar a eliminar el sudor y limpiar los poros y las toxinas.
  8. Para conseguir más confort en la bañera puedes utilizar una almohada inflable o una toalla enrollada para apoyar la cabeza en ella.  

También puedes aprovechar para aplicarte una mascarilla hidratante o relajante sobre la cara.

  • Si solo tienes ducha no hay problema: ambiéntalo todo de forma especial y masajea tu piel con un guante mientras aplicas el jabón. Cuando termines el baño, intenta salir poco a poco para no marearte; no te levantes de forma brusca. Aplica la crema hidratante para proporcionar humedad intensa a tu piel y así mantenerla bien hidratada. 

Ahora ya que sabes cómo tener un spa en tu propia casa, esperamos que puedas encontrar esa relajación después de un día ajetreado, que desconectes de tus problemas y que tengas dulces sueños.